¿Estoy embarazada o se trata del síndrome premenstrual?

El aumento de apetito, el deseo de alimentos  dulces, los cambios de humor o el crecimiento del volumen de los pechos suelen ser síntomas de embarazo pero, también, forman parte de los cambios que algunas mujeres notan previos a la menstruación (Síndrome premenstrual, SPM). Y estas semejanzas pueden llegar a crear confusiones, y alguna que otra decepción, cuando se está buscando quedarse embarazada. 

Son muchas las veces en las vemos sólo aquello que queremos ver y entendemos aquello que previamente queríamos entender,  sin acabar de prestar atención a lo que realmente hay delante de nuestros ojos o a lo que nos están explicando. Y la situación que hoy nos compete no es una excepción. Así que, aun sabiendo que algunos síntomas pueden ser difíciles de diferenciar, vamos a intentar brindar un poco de luz sobre el tema para evitar malentendidos.

  • Ausencia de la regla:

El retraso de más de una semana o la falta de regla durante un ciclo puede hacernos creer que, efectivamente, estamos embarazados. Pero, por desgracia, el retraso o ausencia de la regla puede tener otras muchas causas además del embarazo, por lo que no podría servirnos como herramienta aclaratoria de nuestra condición o estado. La mayoría de los test de las farmacias son sensibles a partir de la cuarta semana de gestación por lo que podría salirse de dudas con cierta facilidad.

Si finalmente el ciclo no viene y no estás embarazada no tiene por qué se grave pero es conveniente que te visite un médico para estudiar la causa de la falta. El estrés, una bajada de peso, el síndrome de ovarios poliquísticos, cambios en la medicación anticonceptiva, problemas de tiroides o incluso el inicio de la menopausia pueden ser algunas de las causas habituales de falta de regla.

Para acabar de confundirnos, existe lo que se llama el sangrado de implantación que podría hacernos pensar que la regla va a comenzar a bajar pero finalmente no baja. Así que, podría darse la situación en la que hubiera un poco de manchado pero sí estuviéramos embarazados. Esto ocurre cuando el ovocito fecundado se adhiere al tejido endometrial, unos 10 o 14 días después de la concepción, si bien no ocurre en todos los casos ni en todas las mujeres. En este caso sería un manchado leve y que no iría a más en comparación con la regla, que podría comenzar también levemente pero que seguidamente iría a más.

  • Alteración del apetito: 

El aumento del apetito o el deseo de comer más dulce es algo común tanto al embarazo como a la etapa pre menstrual de muchas mujeres. Los cambios hormonales en los niveles de estrógenos y progesterona hacen que aumenten las ganas de consumir alimentos ricos en azúcar o grasas. Lo que no suele ser tan común es desarrollar aversiones a determinados a alimentos u olores. Éste sería un síntoma más determinante de una situación de embarazo.

Entre las alteraciones del deseo de comer existen, además, algunas curiosidades que son más frecuentes entre las embarazadas y que no se dan durante el SPM. Es el caso de la Pagofagia, un fuerte deseo por comer hielo o bebidas heladas, o la pica, un trastorno alimentario que se caracteriza por la necesidad por comer cosas que no son alientos (arena, objetos, papel, plásticos), lo que puede llegar suponer graves problemas de salud. 

Si este fuera tu caso, habría que felicitarte por el embarazo pero también habría que recomendarte buscar ayuda médica para evitar problemas mayores.

  • Nauseas: 

Mientras que un ligero malestar digestivo puede ser habitual tanto en el SPM como durante el inicio del embarazo, las náuseas o los vómitos suelen ser exclusivos de este último. El 80% de las mujeres embarazadas los padecen antes de la semana 9 de gestación. Y, normalmente, estos desagradables síntomas desaparecen durante el segundo trimestre. Algunas mujeres con síndromes premenstruales muy complicados también pueden llegar a experimentar náuseas y vómitos pero son menos los casos.

  • Cambios en los pezones: 

Aunque durante los días previos a la menstruación se pueden experimentar cambios en los pechos (hinchazón, dolor, hipersensibilidad en los pezones), los cambios visibles en los pezones son exclusivos del embarazo. Un incremento en la  intensidad del color de areola, alrededor del pezón, o la elevación continuada del pezón, de manera que queda más sobresaliente, pueden ser indicativo de embarazo desde muy pronto, incluso ya desde la primera o segunda semana de la concepción. 

  • Congestión nasal,  inflamación de encías.

El incremento de hormonas en sangre puede alterar la funcionalidad de todas las mucosas del cuerpo, entre ellas la nariz o la boca. La congestión nasal  o, por el contrario, sequedad e inflamación de las fosas nasales; o la alteración de las encías por inflamación o sangrado pueden ser síntomas de embarazo. Estos síntomas podrían ocurrir también previo a la menstruación en personas con síndromes pre menstruales muy agudizados pero no es lo normal. Es más habitual que ocurra cuando se haya consumado una fecundación.

Ahora bien, existe toda una lista de otros síntomas -también comunes para ambas situaciones- que son más difusos y son los responsables de generar confusión: 

  • Estreñimiento y aumento de las ganas de hacer pis

Los niveles de progesterona relajan el músculo liso y con ello ralentizan los movimientos intestinales y hacen que pierda tono la vejiga. Y es que, tanto en la segunda fase del ciclo menstrual -previo a la regla- como durante el embarazo, los niveles de esta hormona crecen bastante, generando este tipo de síntomas.

Además, en caso de embarazo, el aumento de la actividad metabólica y del volumen de sangre hace que tengamos más líquidos que eliminar. De hecho, será bueno que así sea para evitar exceso de retención de líquidos en piernas y abdomen.

  • Cansancio

Durante el SPM es común que se den alteraciones del sueño que generen cansancio diurno. Además, el incremento de la hormona progesterona también genera letargo físico y mental, que se ve ligeramente más agudizado en caso de embarazo pero que también puede darse, más o menos intensamente, durante el SPM, según los casos. Una dieta rica en vegetales, bajar el estrés y suficientes horas de sueño suelen ser de utilidad para combatir el cansancio. 

  • Dolor 

El principal y más habitual síntoma en el SPM es el dolor: pélvico, de piernas, de cabeza… El calor, el ejercicio y una correcta alimentación que aligere la carga de trabajo al hígado pueden ayudar con estos síntomas que, en general, duran poco tiempo una vez que baja la regla. En el caso de embarazo, los dolores suelen ser ligeros y suelen estar centrados en el bajo vientre o en la espalda.

  • Cambios de humor: 

Aquí la cosa se complica. Irritabilidad, cambios de humor, ansiedad, labilidad e incluso síntomas de depresión son comunes a cualquier situación fisiológica que implique variación importante en el nivel de hormonas de la mujer. Y ambas situaciones, el embarazo y el SPM, son momentos de cambios hormonales importantes.

Generalmente, con un poco de ejercicio y de buen descanso nocturno estos síntomas mejoran y finalmente desaparecen al llegar la regla. Si no fuera así cuando ya han pasado dos semanas de la menstruación, y no estás embarazada, sería recomendable que visitaras as un médico para que identifique las razones y podáis trabajar en la solución.

Los cambios de humor en una mujer embarazada pueden durar hasta incluso después del parto. 

A pesar de que nos sea inevitable fijarnos y estar muy pendientes, la presencia o ausencia de estos síntomas no suele tener el valor suficiente como para elaborar un diagnóstico claro de embarazo. Desde aquí, te invitamos a cultivar la paciencia como mejor puedas. Nosotros podemos aportar nuestro granito de arena con la acupuntura. Pero deberás esperar un poquito para hacerte un test de farmacia que, en casos de ser positivo, tiene un 100% de eficacia. Los falsos negativos, en cambio, sí existen. Así que, si después de un test negativo, continúas con dudas, espera una semana más y repite la prueba. Suerte!

Síntomas de SPM Síntomas comunes Síntomas de embarazo
Manchado leve de inicio que se agudiza Manchado leve  Ligero manchado rosáceo de inicio que se frena
Alteraciones en el apetito Aversión a comidas u olores
Náuseas y/o vómitos
Pagofagia y/o pica
Hipersensibilidad en el pecho Intensidad en el color de la areola y cambio en la morfología del pezón
Congestión nasal y afectación de encías
Estreñimiento
Amento de la micción
Cansancio
Dolor importante, pélvico, cabeza, piernas Dolor en el bajo vientre, leve o moderado Dolor leve, pélvico o de espalda
Cambios de humor

Referencias: 

https://www.medicalnewstoday.com/articles/323122#symptoms-unique-to-pregnancy

https://www.healthline.com/health/womens-health/pms-symptoms-vs-pregnancy-symptoms#TOC_TITLE_HDR_1

https://www.healthline.com/health/pregnancy/early-symptoms-timeline#symptoms-timeline

https://www.mayoclinic.org/healthy-lifestyle/getting-pregnant/in-depth/symptoms-of-pregnancy/art-20043853